La asociación de comunicaciones móviles, GSMA, ha anunciado la creación del logotipo Mobile Broadband, que identificará los productos listos para conectarse a la red a través de conexiones celulares de banda ancha.
La iniciativa cuenta con el respaldo de fabricantes como Asus, Dell, Toshiba o Lenovo, y las operadoras Telefonica, Vodafone, Orange o TeliaSonera, entre otros. Las empresas tienen pensado gastarse casi 700 millones de euros durante el próximo año en la promoción de las conexiones de alta velocidad HSDPA y LTE y ofrecer una alternativa a soluciones basadas en WIFI o WIMAX. Con ello se podrán conectar a internet todo tipo de dispositivos, desde portátiles hasta frigoríficos, cámaras y automóviles.
La integración de los módulos de conexión en los portátiles resulta cara ahora mismo. Se espera que con la proliferación de Mobile Broadband, los costes se asemejen a los de WIFI. Además se pretende que el acceso sea sencillo, sin necesidad de que el usuario tenga que instalar programas específicos o sea necesario conectar modems USB externos.
Los portátiles que lleven estos chips inalámbricos integrados llevarán el sello de Mobile Broadband para que sean identificables. Las previsiones apuntan a verlos en las estanterías de las tiendas de 91 países esta Navidad.